Por Jhonsson Rojas. Periodista Caracol Noticias y Gol Caracol
Era una noche llena de esos calores que se pegan al cuerpo, luego de una larga jornada de trabajo, llegamos con mi hermano, Camilo y John el camárografo de Caracol.
Previamente lo había llamado al celular para que me alistara su caja de los recuerdos, sus fotos, sus medallas y todas sus historias.
Germán "Burrito" González, un grande del fútbol de nuestro departamento estaba ahí. Con la sonrisa y la alegría intacta, por el logro de llegar por primera vez a una finalísima del fútbol colombiano, luego del empate sin goles ante Huila, esta vez como asistente del profe Jorge Luis Pinto.
Me presentó a su esposa, su hija y un nieto, compalcidos miraban la felicidad que desbordaba Germán con este reportaje que yo haría para el noticiero. Claro no era para menos, él, uno de los sobrevivientes del subtítulo del 64 ya igualaba el registro, de ser subcampeón, pero quería más.
Una a una sobre la mesa fueron cayendo las fotos. Intactas, como si el tiempo, los 42 años no hubieran pasado. Me mostró la alineación, me habló emocionado, como ése partido en Manizales fue toda una proeza. Me contó que llegaron en cinco taxis, justo minutos antes de jugar. Que hicieron lo posible, pero que al final se quedaron con las ganas de traerse la primera Copa.
"Burrito", le pregunté por qué?. Y comenzó a describirme que su padre también futbolista se trenzó en una pelea con el ecuatoriano Eloy Ronquillo, padre de Gisselle, la famosa "Gigi", mi amiga, alguna vez noviecita mía, ¡eh el mundo es un pañuelo no! Este hombre que prestó los servicio para el equipo motilón, y que perdería la vida en el fátidico vuelo de Avianca en el cerro de espartillo, pués no midió la fuerza de González, apenas si alcanzaba a gritar quiténme éste burro de encima, así heredó el remoquete de "burrito". A cada esquina llegaba ahí estaban los compañeros del colegio o del barrio, gritando y él respondiendo como su padre a puño limpio. Se cansó de pelear y desde ese entonces lleva "el burrito" encima, es más, mucha gente ignora que se llama Germán González.
Entre esas fotos encontramos a los grandes del fútbol, al ídolo suyo, Pelé, a Maradona, Bilardo, Cubillas y un sinnúmero de futbolistas amigos que se tomaron la foto con el "burrito" nortesandereano. Ese que se hizo grande con su fuerte remate, fue el Freddy Rincón de la época, el jugador que estuvo en los títulos del Deportivo Cali, el mismo que vistió la camiseta de la Selección Colombia en múltiples oportunidades.
Ese día lo conocí. Luego vi como se convirtió en un hombre vital en el título del Cúcuta 2006. En el primer juego de la final, entregaba desde el banco instrucciones guiadas por Pinto y en Ibagué, algo que me impactó. Cuando el Tolima anota el 1-0, Germán saltó del banco a hacer su "show", se fue a reclamarle a Jorge Hernán Hoyos, una falta de Anchico sobre Portocarrero y se tomó cerca de minuto treinta, tiempo que quizá ayudó a los jugadores a tomar el aire necesario para guardar la calma y frenar el impetú de los tolimenses, que a esa altura parecía una caldera, con un grito ensordecedor con el Sí se puede.
"El burrito" caminó hasta la mitad de la cancha y le discutía a Hoyos, hasta que finalemente lo pudieron sacar. Fue su gesto final, la firma que no pudo colocar en el 64, la hizo el 20 de diciembre de 2006, aquella noche lo vi colgarse la medalla que siempre soñó, la de Cúcuta Campeón y desde ese día lo veo como un héroe silencioso del título.
1 comentario:
EXCELENTE NOTA, FELICITACIONES, ESA ES LA GENTE CON PERSONALIDAD, LOS CUCUTEÑOS, SOMOS ASI, NO LE TEMEMOS A NADA, SOMOS BERRACOS. EL BURRITO GONZALEZ LO MAS GRANDE QUE HA DADO ESTA TIERRA, ME SIENTO ORGULLOSO DE SER CUCUTEÑO. ADELANTE CUCUTA, ADELANTE CON ESTA PAGINA.
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